viernes, 8 de octubre de 2010

Uno le pone su nombre a las cosas cuando quiere y/o debe hacerse cargo de ellas. Pero fui obligado a ponerle mi nombre a mi vida. No es una carta de suicidio (jaja) aunque a veces cuesta hacerse cargo de las cosas.

2 comentarios:

Agustina dijo...

a man destined to hang can never drown

MISION: Que se corte las pelotas! dijo...

el problema radica en que sos "Juancito Perez A LA ORDEN", y debido a ello se te obliga a hacer cosas, como ponerle nombre a tu vida.

Para mi, tendrias que ser solamente JUANCITO PEREZ